sábado, 17 de marzo de 2007

El día de antes…

Sábado día 16, son las seis de la tarde y estoy postrado ante mis libros. Por mi cabeza rondan diferentes ideas, ganar, jugar, disfrutar, rivalidad, HOCKEY. No, no me puedo concentrar tengo que escribir lo que esto para mí.

Un campo veintidós jugadores, paradojas de la vida que hacen que compañeros se vuelvan adversarios y viceversa. Un factor que endulza esta tarta que todos nos queremos comer… Nervios, ante todo, nervios.

Allá en la pagina de nuestro antiguo club quedan las fotos de lo que antaño fue un gran equipo y que ahora se enfrenta de forma casí predestinada.






Se tratan de sentimientos contrariados, alimentados por rumores y verdades a medias que hacen que todo esto suba de temperatura. En mí, ganas de jugar y vencer, en mis compañeros, no se.

6: 30 Mañana es el día, un proyecto que tenía en mente y paso a la práctica haciendose realidad, me ha demostrado muchas cosas y me ha enseñado muchas otras que yo no veía así. Ahora comprendo la dificultad de afrontar un reto como es división de honor, pero también comprendo el orgullo que hace que nos aferremos a nuestro amor propio y no demos el paso atrás en su momento.

Esto es más de lo que yo me esperaba, no por eso digo que me pese, disfruto haciéndolo y me encanta, pero creía sinceramente que era más fácil. Es difícil andar por el camino cuando tan solo queda de él las piedras, es decir, no puedo hacer más si además de ponernos obstaculos para usar el campo, no nos dejan usarlo. Sí, mañana es el día donde veré si mi proyecto tiene viabilidad, si puede ser.



Estoy deseoso de que llegue mañana… por qué no avanza este maldito reloj.

No hay comentarios: